Creemos firmemente que un progreso significativo se inicia y se sostiene con un consentimiento informado.

Los servicios conductuales estándar habitualmente requieren consentimiento para brindar terapia. Este proceso garantiza que el individuo y la familia estén informados y estén de acuerdo con el enfoque de tratamiento; sin embargo, no considera la necesidad de un ajuste, comprensión y conformidad continuos, basados en las necesidades dinámicas del individuo y de la familia. Además, el consentimiento lo otorga una persona física mayor de edad; mientras que el consentimiento requiere que se escuche la voz de todos al analizar las opciones de tratamiento.

Alentamos la consideración reflexiva y reconocemos la perspectiva individual y familiar durante todo el tratamiento. Este enfoque fomenta el desarrollo y refuerzo de importantes habilidades de defensa, así como una independencia genuina tanto para el individuo como para la familia.